Llegué y me dijo:
- Pero, ven, háblame de ti.
Y yo pasé del escepticismo de “no-sé-porque-tanto-revuelo-por-una-muchacha” a establecer un vínculo afectivo con ella, un diálogo entre culturas, entre países, en intentar –ingenuo de mí- reponer en una conversación el daño histórico con las civilizaciones pre-colombinas.
- Pero, ven, háblame de ti.
Y yo pasé del escepticismo de “no-sé-porque-tanto-revuelo-por-una-muchacha” a establecer un vínculo afectivo con ella, un diálogo entre culturas, entre países, en intentar –ingenuo de mí- reponer en una conversación el daño histórico con las civilizaciones pre-colombinas.
Hablamos de la Historia, la Historia de las pequeñas historias, las culturas pre-incaicas –yo las desconocía-, las danzas folclóricas y ancestrales, la energía de la Tierra, la Pachamama.
Nombré Kitu –como ellos quieren llamar a su Tierra- y ella explotó en emoción y alegría. ¡Cuánta felicidad por una letra! ¡Cuánta energía!
Así transcurrió la noche, con su cuaderno verde, sus fotos secretas que desvelaba de vez en cuando (no todas, por supuesto), sus mensajes cómplices con Boscá, su mirada profunda, eterna, su sonrisa.
Volví a casa pensando: ahora entiendo el alboroto que genera esta Mujer en Tierra Firme, esta poeta de los sin-voz, esta caminante del Mundo, esta mujer Lagarto (no sé si lo cito bien).
Un abrazo y buen viaje, Carla!
2 comentarios:
Yupaichani mashi. Jesis, me alegra haberte conocido, me alegra que hayas visto el docu y me alegra aunmás que seas tú, en tu aula, quien guie a esos niños, quie cuente la historia generalmente no contada.
Un abrazo y espero regresar a Valencia y tener más tiempo para compartir más de mi tierra y de la tuya.
Carla.
Jesús, Carla!!!!!
Ojalá hubiera más tiempo y menos distancias...
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