lunes, 20 de julio de 2009

Gracias, Forges, gracias.

Hoy lo he vuelto a hacer.
Me había dicho que nunca mas, pero no he podido resistir la tentación.
He vuelto a leer la prensa.
¡Maldita sea!

Después de meter los pies en el fango de las pesadillas del caso Marta del Castillo, temblar ante el riesgo epidemiológico de los bebés, la sospechosa visión esperpéntica que nos dan de Chávez, el derrumbe de los mitos revolucionarios sandinistas, el escalofriante cruce de acusaciones tintadas en sangre entre la Mafia y el Estado italiano (nombrando de perfil al actual presidente Silvio Berlusconi) y con el inquietante caso Gürtel abierto, incluída la sospecha sobre los hombros de Rita y el azotamiento de Esperanza Aguirre sobre el "pobre" Marianito.
Y en medio de esta vorágine de desesperanza y resignación, una viñeta aparece de entre las sombras para arrancarme una sonrisa (en realidad, una carcajada en medio de la calle).


Gracias, Forges, gracias.

1 comentario:

Anónimo dijo...

De nada, Jesús Ge