sábado, 16 de enero de 2010

EL POEMA QUE ME HUBIERA GUSTADO QUE ROMÁN PORRAS ME DEDICARA LA NOCHE DEL CANGREJO.


Podría ser mañana todavía,
o haber muerto esta tarde como siempre.
Entonces te hablaría desde el sitio
donde yacen mis otros sin palabras.

Con ojos esfenoides te hablaría
como se miran ellos a las cuencas:
con carpianos y dientes, con maxilas,
susurrando rechinos contra el yunque.

Podría ser ahora y seguir muerto.
Entonces te hablaría como se hablan
los sólidos miscibles en la noche.

Con la lluvia y la carne. Como ellos.
Como ellos en la espuma, con los labios.
Con palabras y lenguas te diría…

Román Porras

1 comentario:

roman dijo...

Jesús, no te pongas así. Ya sabes que yo te dedico lo que haga falta :))... Un abrazo