miércoles, 14 de noviembre de 2007

POESÍA VISUAL Y POESÍA CONCRETA



Bartolomé Ferrando es profesor titular de Performance y Arte Intermedia en la Facultad de Bellas Artes de Valencia.


Como Performer (o Artista de Acción) ha participado en festivales por todo el mundo (Canadá, EEUU, Bielorrusia, México, Japón, Corea, Argentina, Chile). Actualmente dirige el Encuentro Internacional de Performance que todos los años se presenta en el IVAM de Valencia.


Forma parte de los grupos FLATUS VOCIS TRIO (junto con Fátima MIranda y Llorenç Barber), TALLER DE MÚSICA MUNDANA y ROJO, dedicados al desarrollo de prácticas creativas a medio camino entre la música, la poesía y el arte de acción.


Ha colaborado en diferentes publicaciones sobre la Performance y la Poesía Visual. Y de manera individual ha publicado los ensayos HACIA UNA POESÍA DEL HACER, LA MIRADA MÓVIL y EL ARTE INTERMEDIA; los libros de poemas TRAZOS, PROPUESTAS POÉTICAS y LATIDOS.
allí
en un recodo

una piedra pequeña

se llena de sombra




una rama se desprende
y cae al vacío

sin ruido alguno



espacio desgarrado




herida aérea





el día
empieza a guardarse los colores


el espacio se llena de flores negras


los árboles se arrancan palabras
unos a otros

hasta quedarse afónicos



llueve con fuerza
sobre los ojos del bosque



el día empieza a pudrirse

mientras germina el tiempo




la página del día
le ha dado la espalda al muro en ruinas


máscara del paisaje


sus grietas habitadas
empiezan a oler a noche



la frontera de la luz
tiene los nervios anestesiados en rojo


el color
se hunde
en la página del mar cubierta de arrugas


y rebota
en el tímpano de los ojos


hílvanes de música visible

3 comentarios:

Víktor Gómez Valentinos dijo...

He entrado a ver la obra de Bartolome Ferrando a su web y me parece muy lograda, muy interesante, desde "Equilibrio" con un A invertida en equilibrio sobre el 1, hasta su poema erótico del dedo y el cielo.

Un abrazo,

Tu Víctor

Víktor Gómez Valentinos dijo...

Bartolome Ferrando es cojonudo. Y punto.

Tu Víktor

Luciérnaga dijo...

Qué bueno! sí señor, sí.