En el año 1897 el Dr. Rudolf Willinger descubrió la interrelación de dependencia entre el nivel fonético (sonido) y el semántico (significado) de las palabras en el lenguaje. Determinados fonemas generaban campos semánticos comunes. De esta manera, en la actualidad, podemos encontrar una clara relación entre los significados de palabras que se escriben con los mismos fonemas.
Años más tarde, en 1941, el matrimonio Volanteur localiza restos de un alfabeto ideografónico anterior a la escritura cuneiforme. Dicho alfabeto representaba una idea compleja a partir de un solo sonido.
Este descubrimiento anularía las teorías de los Alfabetos Ideográficos Chino y Maya y del Alfabeto Fonético Occidental.
En 1968, el historiador Giuseppe Corelli plantea la teoría de que el lenguaje verbal podría haber surgido como respuesta a los primeros sentimientos. El ser humano habría designado con “palabras” aquello que no podía tocar o señalar. De ahí que, según su teoría, los primeros términos se generaron para definir la alegría, la tristeza, la rabia o la desesperanza.
“El sonido de una palabra lleva implícita la carga semántica y/o sentimental de la idea”. Karl Lowenbach
(todas estas teorías son falsas, forman parte del recital ESTO NO ES VANGUARDIA de Jesús Ge, que se presentará el próximo domingo 13 de diciembre en el Festival (H)ETERODOXIAS, en el Sporting Club Russafa)
1 comentario:
Puede que sea falso pero me ha encnantado.....jejej
Un abrazo Jesús, nos vemos en el Sporting.
Mila
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